domingo, 1 de agosto de 2010

No quiero perder mi mirada sincera ! Aprendí a aceptarme como soy, no necesito tu aprobación. Prefiero mirarte y poder hablarte de mi, que veas lo que soy y no lo que nunca fui, prefiero abrazarte y que sientas mi calor, rozarte y que sientas mi frescura, amarte y que sientas latiendo mi corazón. Hace mucho ya entendí, que todo lo que hago lo hago por mí. Que no necesito a nadie que marque mi camino, el camino yo ya de antemano lo elegí. Puedo tropezar con piedras, baches y adoquines, pero de ellos aprendí. Aprendí a de esas caídas levantarme (porque también aprendí a admitir que muchas de ellas no fueron solo tropiezos), a quererme y a respetarme. [Porque esa es la única forma lógica de poder llegar a querer y respetar a los demás también]

No hay comentarios:

Publicar un comentario